sábado, 31 de diciembre de 2011

Homo erecuts, Juan Eslava Galán


A la lista anterior debo añadir que al final el libro se vuelve un poco cansino de más, con intentos de humor que no alcanzan ni de lejos los comienzos, aparte de que lo que comienza siendo entretenido y vivaz, chispeante, se convierte en aburrido y cargante.

lunes, 26 de diciembre de 2011

El emblema del traidor, Juan Gómez-Jurado

Tenía que pasar. Era algo que tarde o temprano debía ocurrir. Hablo de que un autor novel, escribiendo una novela, consiga una obra que supere con creces a la media de las editadas por profesionales.
Juan Gómez-Jurado ya no es un escritor amateur, sino que debe entrar de lleno entre los grandes de la literatura en castellano, codeándose con los ilustres (que cada vez lo son menos).
Por menos de un euro y medio puedes acceder, en Amazon, a una novela que nada tiene que desear a la de cualquier otro autor patrio. Yo diría que incluso es mucho mejor que la mejor novela publicada en castellano en los últimos años.
Los que me conocéis sabéis que no suelo dar cera a quien no la merece. Pero la evolución del autor está clarísima. De Espía de Dios y Contrato con Dios, que sin ser grandes obras sí que tienen su cosa, pasamos a una novela muy bien estructurada y que hace que me quite el sombrero con admiración.
Es la primera vez que me ocurre con un autor más o menos novel: conforme voy leyendo le voy pillando los gazapos, esos pequeños (o no tanto) errores argumentales que desestabilizan la trama y a los que tanta tirria les tengo. Pues bien, mientras iba leyendo esta novela, en algunas partes pensé ¡te pillé!, pero no, ha sido el autor el que me ha cogido a mi por sorpresa, porque las vueltas argumentales están muy logradas, y la intensidad también.
Conforme iba leyendo la novela sentía una especie de deja-vu, como si estuviera ante otro autor. En un momento me pareció Dickens pero sin la paja que lo suele acompañar, lo que es de agradecer. No obstante, fue al final, en el epílogo, el propio autor quien me dio la pista: Dumas.
Efectivamente, leer a Gómez-Jurado en esta obra es casi como leer a Dumas y a su Montecristo, o casi. Quizás mejor que él, porque no hay tanta paja.
Y no, no es otra de esas novelas magufas basadas en el enésimo secreto inconfesable de los Masones, o en si la virgen María lo era o no, o si Newton descubrió la Piedra Filosofal. Aunque aparecen Masones, éstos no son más que unos meros acompañantes tratados con la seriedad que se merecen.
En fin, que si quieres una novela de aventuras muy bien pergeñada, con una intensidad argumental creciente y con todas sus cosas bien puestas:¿ A qué esperas para gastarte el euro y medio que vale en Amazon?

sábado, 24 de diciembre de 2011

La muerte del Capitán Futuro, Allen Steele

El autor hace un requiebro a cierta serie Pulp de los años 40 cuyo protagonista es el citado Capitán Futuro. Ignoro si le hace justicia o no, porque el citado, al menos en este librillo, no es precisamente un personaje que destaque por su inteligencia y buen hacer.
De todos modos se deja leer y tiene un genuino sabor al género, sin pecar de excesivamente arcaico pero sin peder un ápice de los temas y el desarrollo de la época.

miércoles, 21 de diciembre de 2011

¡Indignaos!, Stépane Hessel

Mucho ruido y pocas nueces. Eso es este libro. Pese a todo el revuelo que ha ocasionado no es más que una excusa para hacer proselitismo de la represión israelí sobre los musulmanes de ese área.
Con esto no quiero que se me malinterprete: no estoy defendiendo la política israelí, ni acusando a la otra parte. Lo que estoy diciendo es que el autor comienza con unas palabras muy coherentes sobre el estado actual de la sociedad y termina en lo que le interesa: política barata.
Está muy bien eso de intentar movilizar a la juventud, pero hay que movilizarla para todo, no solo para el tema palestino.
Sin embargo, el panfleto tiende hacia lo político en lugar de hacia lo social, y le sobre la última parte, que es completamente parcial, no respecto a lo que pasa allí, sino respecto a lo que pasa en muchos otros lugares, con problemas enormemente más graves que mantener a unos musulmanes recluidos en una ciudad.
Por lo tanto, pese a no estar mal, pienso que al autor se le ve claramente el plumero a mucha distancia.

sábado, 17 de diciembre de 2011

El eterno olvido, Enrique Osuna

Antes de nada, decir que no he terminado de leerlo, de hecho me he quedado bastante al principio del mismo, gracias a los comentarios de Zaida, que tampoco pudo finalizarlo de forma adecuada pero que al menos llegó, de aquella manera, al final.
No recuerdo haberme enviado la demo de libro a mi Kindle, no obstante apareció ahí. Prefiero no pensar en cómo ha llegado: o bien porque no me acordé o bien porque fue inyectada por alguien… Mejor lo dejo así.
Bueno, el libro no está mal, al menos lo que he visto. El autor escribe bastante bien, de hecho no se nota que sea novel.
De todos modos, parece ser que la trama y el desarrollo cuenta con bastantes altibajos, con partes muy interesantes y bien escritas y otras no tanto.
No obstante, quizás debierais darle una oportunidad.

miércoles, 14 de diciembre de 2011

El camino de Steve Jobs, Ellio

Nos encontramos ante una nueva apología de Steve Jobs por parte de uno de sus compañeros de trabajo, Jay Elliot, que formó parte de la plantilla directiva de Apple durante bastante tiempo.
Hay que reconocer una cosa muy importante: Jobs ha hecho lo que ha hecho, pero de ahí a endiosarlo como si fuera el mayor genio de toda la historia va un trecho bastante grande.
En su mismo camino tenemos a, por ejemplo, Bill Gates, y jamás se le ha dado tanto jabón como a Steve. No sé, pero si me pongo el gorro de conspiroparanoico… puedo llegar a pensar que todo es publicidad pagada.
Jobs es bueno en lo que hace, pero de ahí a encumbrarlo hasta los límites en los que se lo ha hecho… me parece no sólo jactancioso, sino meramente indecente.
Volviendo al libro, en él asistimos, de una forma más o menos cronológica, a la evolución de Apple desde la salida del primer Macintosh hasta la del iPad, tocada de refilón.
Jay presenta a Jobs y rápidamente pasa a contarnos la forma que tiene de llevar Apple, con todas sus durezas y su eterna exigencia, como un pequeño dictador.
Lo interesante del libro es que está enfocado hacia los procedimientos y la forma en que Jobs llevaba la empresa, en cómo motivar a los empleados y en cómo desarrollar productos como el iPhone, que en su momento dieron el gran bombazo.
Es decir, Jobs aparece como el medio, no como el objetivo del libro. Además, el autor nos explica cómo podemos, nosotros mismos, realizar lo mismo en nuestras empresas, por lo que el libro está un poco orientado, también, hacia el ejecutivo y la auto ayuda.
De la edición en castellano tengo que decir que no está muy bien traducida, con párrafos que parecen sacados de un traductor automático, y otros orientados hacia las variantes latinas (que no es que sea malo, pero si se utiliza el español de España, hazlo en todo el libro).

sábado, 10 de diciembre de 2011

Dos años de vacaciones, Verne

Poco que comentar de este libro, que es una cuarta o quinta lectura, aunque esta vez disfrutando de las ilustraciones originales, que tampoco es que destaquen mucho que digamos, por lo que al final he terminado leyendo una edición electrónica de similar fidelidad a la que tengo en papel, y he ido mirando las ilustraciones cada dos o tres capítulos leídos.
Como siempre, Verne cada vez me parece más pobre, de hecho esta vez le he descubierto algún gazapo en cuanto a las cosas que hacen los chicos y que, de haber ocurrido en la realidad, no hubiera sido factible.
Tan sólo hay que leer a Golding y a los niños que quedan aislados en una situación similar, obra mucho más creíble pese a su componente fantasioso.
Aparte de eso, el libro es bastante aburrido y tan solo en momentos puntuales retoma algo de acción.

miércoles, 7 de diciembre de 2011

Ficciones, Borges

Lo siento. De joven Borges me parecía difícil y críptico. Ahora me parece simplemente inconsistente y sin mucho sentido, con un falso sentido de profundidad que no llena ni satisface.

Quitando el cuento de La Biblioteca de Babel, todos los relatos me parecen trasnochados y de una completa ausencia de interés. Y aun este ha perdido casi todo su encanto.

Sinceramente, no sé qué le veis a Borges. Apenas me gustaba en su momento y ahora, simplemente, no me gusta. Espero que no me pase igual con Gabriel García Márquez…

lunes, 28 de noviembre de 2011

Efímeras, Kevin O’Donnell, Jr.

Orgullo y prejuicio, Jane Austen

Este es uno de esos libros que te regalan cuando te das de alta en Amazon o en Barnes & Noble, y que también suele venir entre esos mil (o los que sean) que te regalan cuando compras un lector-e y que valoran en varios cientos de euros…
Lo cierto es que la novela no está mal teniendo en cuenta que se trata de una obra escrita a principios del siglo XIX por una mujer soltera y que se entronca en el romanticismo y la literatura decimonónica en la que se suele hablar de la nobleza isabelina, abstrayendo otras capas sociales.
Todo comienza con la enorme necesidad, obligada por las convenciones sociales imperantes, de una madre para casar a sus cinco hijas que, al tener poca renta, se presenta como tarea bastante dificultosa.
Aprovechando que hay un noble soltero cerca, envía a sus hijas a que lo visiten, o más bien se busca las triquiñuelas para que, conforme a la cortesía imperante, sus hijas vayan a su casa. Si encima una de ellas enferma en dicha casa y tiene que mantener reposo forzado, miel sobre hojuelas, haciendo caso omiso a lo peligroso que podía ser un mero constipado en aquellos años.
Surge el amor, pero un amigo, Darcy, convence a Bingley de que hay gato encerrado y este se aleja. Mientras, el citado Darcy entra en contacto con Elisabeth, otra de las hijas y la más despierta e inteligente.
El encuentro resulta bastante duro, y ambos empiezan a odiarse, aunque al final, como en todo este tipo de libros, terminan en su totalidad felizmente casados, y comiendo perdices… cada uno unido a su pareja más conveniente y todo de color de rosa y perfecto…
Lo más cansino de la novela está en que la acción, o más bien la no-acción comienza justo mediada la obra, siendo el principio nada más que una mera presentación de personajes y de circunstancias. Podríamos decir que no sólo ahora se engordan artificialmente las obras.
De todos modos, leída con la conveniente prevención, el libro es muy bonito y quizás llegue a emocionarte. Lo que a mi me ha hecho has ido impacientarme sobremanera por lo tontos que llegan a ser los enamorados y la gazmoñería de la autora.
***
Edito y añado un texto que ha escrito Cathermac en Lectores Electrónicos y que me parece complementa ampliamente mi entrada. La edición no es de estilo, sino tan solo separar bien los párrafos y demás:

Que esto no es romántica... es novela costumbrista... aquí lo que se trata es de enseñarnos cómo era la vida habitual en esa época, cómo era el tema del cortejo, las propuestas, la obligación de una mujer de casarse para ser algo, la importancia del mayorazgo en las herencias (como no hay hijos varones hereda un primo lejano cosa que podéis ver en la fabulosa serie Downton Abbey) nos muestra y esas era la intención de mi querida Jane de que veamos como era su sociedad y sutilmente la critica hasta la exageración...
El personaje de la madre está aumentado hasta la saciedad. su única intención es hacer que sus hijas saquen un buen partido y para ello hace lo que sea, aunque sea exponer a su hija mayor a una enfermedad e incluso a una posible muerte con tal de que pille las 3000 libras al año que tiene Bingley de renta...
y la las 6000 de Darcy, una lotería...
Me encanta el pavor de las hermanas Bingley porque Lizzy ha recorrido 3 millas sola por los campos uuuuuu que horroooor... pues en mi pueblo hay una chica que la gente solo conoce de vista porque se pasa el día en la carretera que nos une con Azuqueca de henares 7 kilómetros pa arriba, 7 kilómetros pa abajo... Vamos, las dos brujas estas fliparían...
La parte de Wickam y su obligatoriedad de casarse con la hermana Bennet solo porque han huido es impresionante. en aquella época pasar dos horas sola con un hombre era como un suicidio social si luego no llegabas a casarte.
¿Y que me decís de la pobre Charlotte? Se casa con Collins solo y exclusivamente porque en aquella época es mejor no aguantar a un marido que quedarse sola. que si te quedas sola, como no te deje renta tu padre te ibas al asilo.
Pero por otro lado (como hemos leído en muchas otras novelas) si el marido quería tener un piso con otra querida era de lo mas normal...
Eso es lo que que quería la autora, criticar y ridiculizar su sociedad en la que ella vivía y unos convencionalismos que ella nunca siguió, paso de casarse... lo que pasa es que el tiempo y la imaginación femenina solo ha conseguido que perdure la historia del Darcy-príncipe azul, que vamos, que todas en algún momento hemos soñado con eso.

lunes, 21 de noviembre de 2011

El Aleph, Borges

El Aleph es una colección de 17 cuentos del autor, y el motivo de mi relectura es el aniversario de su nacimiento. También tengo en la lista sus Ficciones, que espero sean mejores que éste que comento.
El libro lo leí en mis mocedades y apenas me gustó, pero imaginé que se debía más a mi incapacidad por apreciar lo bueno que al de la calidad de la obra.
Ahora creo que estoy en posición de valorarla con mayor justicia y, sinceramente, el libro no vale nada o casi nada. Ignoro cuáles son sus valores, pero es que no encuentro ninguno. Muchos cuentos no tienen una secuencia coherente, otros son mimiedades sin más, y quizás los dos mejores no llegan a mucho.
Siento ser tan crítico con el autor pero es que no puedo decir otra cosa. De todos modos le daré una oportunidad a sus Ficciones.

lunes, 14 de noviembre de 2011

The Broken Cycle (Grimes Saga, IV), Bertram Chandler

Cuarta novela de la serie de John Grimes en la que se ve envuelto en una especie de realidad alternativa. Todo comienza con una misión de rescate un tanto singular. Grimes parte junto a una chica de la recién formada Policía Espacial en una nave que no es la suya para intentar desactivar una bomba atómica que falló al estallar en medio de una acción terrorista.
La mitad de la novela transcurre en el viaje y los problemas que tienen, ya que el capitán en donde se embarcan intenta beneficiarse a la chica pero ésta no quiere, con la consiguiente tensión emocional.
Lo que me ha llamado mucho la atención es lo que antes se consideraba violencia de género y ahora no. Llama mucho la atención de que la chica aparezca toda arañada, y el capitán también, y que no pase nada más. La realidad actual es mucho más diferente, pero al parecer eso se consideraba normal en la época en la que se escribió el libro.
También podríamos añadir lo que se entendía como picante, que ahora se consideraría una mera anécdota.
En la segunda parte, la bomba explota por accidente y la pareja -Grimes y la policía- se ven trasladados a un universo alternativo a causa de la combinación de la explosión nuclear y el motor hiperespacial, que estaba en marcha.
Allí les ocurren algunas aventuras un tanto atípicas. En una de ellas asisten al combate entre dos supuestas civilizaciones cuyas naves son formas geométricas perfectas.
Finalmente son recogidos por un dios que los lleva a un nuevo Jardín del Edén para que procreen, pero ambos se resisten y al final consiguen que los devuelvan a su universo de origen.
Quizás en la época en la que fue escrita la novela pudiera haber parecido original. Lo que es ahora, peca de demasiado simplista, tanto en ideas como en argumento.

lunes, 7 de noviembre de 2011

The Hard Way Up (John Grimes Saga, III), Bertram Chandler

Tercera entrega de la saga de John Grimes y el Survey Service. En este caso estamos ante una recopilación de relatos que siguen una trayectoria coherente entre ellos, y de hecho, en el último detodos asistimos al ascenso de Grimes con la obtención de su tercer anillo.
Grimes sigue siendo un poco papanatas, y a veces se ve envuelto en problemas por simple mala suerte, aunque siempre termina saliendo con bien de ello. Sus mandos lo odian y le dan las misiones más extrañas y miserables de todas, y encima le surgen problemas imprevistos. No obstante su inteligencia y su tenacidad terminan sacándolo del atolladero.
En The Good Intentions Grimes tiene que transportar a unos científicos a un planeta cuyos habitantes nativos están en estado pre-consciente y una vez allí, debe mantener el campamento durante un tiempo prefijado, lo que significa que será la criada de los científicos. Pese a ello, saca tiempo para sus propias investigaciones antropológicas, que consisten en, de forma inconsciente y para jolgorio ajeno y vergüenza propia, poner en manos de los nativos el conocimiento de las armas.
Pese a ello, y gracias al informe favorable de los científicos, es ascendido a Capitán de correo en funciones, aunque sigue siendo teniente, y en su primer viaje consigue el objetivo asignado de refilón. En The Substracter llevan a quien va a ser cocinero de un embajador en un planeta aliado (lo que de paso mejora sensiblemente la dieta de la tripulación) y, una vez allí, Grimes se interpone en el asesinato de un líder opositor. No me queda claro si consigue que no lo maten o si es justo al contrario, lo que sí resulta evidente es que eso complace a sus jefes.
En The Tin Mesiah es cuando empieza a enfadar a sus superiores mientras transporta a un robot inteligente y autoconsciente como pasajero. El hecho de que el robot haya intentado apoderarse de la nave es incidental para ellos, al menos en apariencia, ya que es muy posible que salvara a la humanidad de ser destruida.
The Sleeping Buoy cuenta cómo tienen que transportar la crisálida de una reina colmena de una raza amiga y cuando la nave pierde la energía en medio de la nada, la citada reina despierta y empieza a controlarlos a todos. Sólo un pequeño accidente hace que Grimes pueda retomar el control y llegar a puerto, perdiendo la condecoración prometida en el proceso aunque salvando las apariencias. El que la reina termine borracha perdida es una baja colateral.
El Adder, que es la nave de Grimes, detecta un extraño pecio perdido en medio de la inmensidad del espacio y se detienen a investigar. Las sondas son repelidas por el objeto, que no emite ningún tipo de radiación física o telepática. A Grimes se le ocurre que está rechazando cualquier cosa metálica, así que construye unos misiles con plástico y pólvora negra, que consiguen despertar a la cosa. Cuando se acercan a ella son absorbidos y el objeto les enseña el uso de las armas y a hacer fuego y luego desaparece. La opinión de la tripulación es que se trata una cápsula de elevación de civilizaciones pre-conscientes que ha fallado. Es lo que se cuenta en The Wandering Buoy.
En The Mountain Movers, sus jefes están tan hartos de sus desastres, que deciden que se tome unas vacaciones en el planeta al que acaba de llevar unos despachos. Dicho y hecho. Aterrizan en el planeta y se dedican a hacer turismo visitando las poblaciones aborígenes procedentes de lo que se supone fue una nave exploratoria que se perdió hace muchos años, durante el ciclo de elevación humana anterior. La realidad es otra: las grandes rocas son naves espaciales que se mueven por telepatía y los nativos forman parte del mismo grupo de elevación que los humanos, cosa que descubre Grimes gracias a que su oficial telepático huye con una de ellas.
Como vemos los desastres causados por este hombre son bastante gordos, pero el último colma el vaso. En What You Know tiene que transportar a una comisionada (con un carácter al más puro estilo de la Srta. Rottenmeyer de Heidi), y lo hace porque es la única nave que queda sin asignación. Como siempre, en el viaje se le estropea el motor hiperespacial y tiene que pedir ayuda. La única nave disponible es una perteneciente a un Imperio que no está en muy buenas relaciones con el de Grimes, añadiendo el caso de que la comisionada transporta secretos de estado. No obstante todo termina bien ya que Grimes ha entresacado un secreto de su pasajera en un descuido de ella, con lo que el informe final resulta favorable y es ascendido por ello pese a la oposición de sus superiores.

jueves, 3 de noviembre de 2011

Steve Jobs, Walter Isaacson

Resulta curioso cómo la gente se pone el cohete en el culo cuando le interesa. Este libro salió a la venta de forma simultanea tanto en papel como en electrónico, tanto su versión en inglés como en otras lenguas. Pues bien, la edición inglesa salió de madrugada hora española y, cuando me levanté y miré, ya había copia pirata sin DRM. En castellano pasó lo mismo: la misma tarde en que salió, pudo bajarse de forma pirata.

Editores: haceos cuenta de qué y para qué vale el DRM.

Yo compré la edición en papel, unos tres días después de que saliera, y en español. Sí, lector de este blog, esta es una de esas veces en las que transijo y compro en papel, teniendo en cuenta que en electrónico no lo hubiera hecho ni aun siendo rico, más que nada por el robo a mano armada que supone.

***

No sé qué pensar de la biografía. Os lo digo en confianza. Por un lado me ha gustado mucho, casi diría que demasiado, y por otro ha habido veces que he estado a punto de vomitar.

Hay muchas cosas que no me han gustado del mismo. Por ejemplo, que más de la mitad del libro está centrada en la historia de las empresas que montó y de hecho, si le quitamos esa parte, con menos de 200 páginas hubiera bastado.

Apple está presente en casi todo el libro, más que Jobs. Y los productos que desarrolló también. Casi parece una apología de las iCosas y del camino que llevó a crearlas.

Si quitamos el último capítulo, en el que se moja un poco, apenas hay nada interesante que ya no se sepa por otras fuentes. De hecho, toda la parte en la que se narra el nacimiento de Apple y lo que pasó con NeXT y con Pixar es idéntico a lo contado en El camino de Steve Jobs, casi diría que punto por punto y con la misma profundidad y detalle.

Y cuando entramos en la segunda etapa, igual que en la obra anterior, también flojea, como si el tema fuera un poco tabú, como si no pudiera o no le dejaran entrar en detalles jugosos sobre la gestación del iPhone o del iPad, que creo son historias de los más interesantes, quizás más que conocer las andanzas de su creador.

Si añadimos otra obra, esta no autorizada (A biography of Steve Jobs, Romain Moisescot), tenemos el conjunto completo de la vida de Jobs tal y como la cuenta Isaacson, pero sin necesidad de leernos este nuevo volumen, que como digo nada más aporta si no es confirmar algunas cosas de la personalidad de Jobs.

Independientemente de lo genio que fuera, de lo que creó y del legado que deja, personalmente era un ser bipolar, mezquino y avaricioso que no paraba en nada con tal de conseguir su objetivo. Y creo que el tratamiento de este aspecto del biografiado es tratado con corrección y coherencia por parte de Isaacson.

Lo que más valor tiene de todo el libro es la última parte, en la que leemos las propias palabras de Jobs en toda su crudeza y toda su redención.

Mi consejo es, que si no has leído los dos libros que he citado, leas este. Vale la pena.

lunes, 31 de octubre de 2011

Ficciones, Borges

Lo siento. De joven Borges me parecía difícil y críptico. Ahora me parece simplemente inconsistente y sin mucho sentido, con un falso sentido de profundidad que no llena ni satisface.
Quitando el cuento de La Biblioteca de Babel, todos los relatos me parecen trasnochados y de una completa ausencia de interés. Y aun este ha perdido casi todo su encanto.
Sinceramente, no sé qué le veis a Borges. Apenas me gustaba en su momento y ahora, simplemente, no me gusta. Espero que no me pase igual con Gabriel García Márquez…

lunes, 24 de octubre de 2011

La caza del meteoro, Jules Verne

Esta novela es una obra un tanto atípica. Es una de las poquísimas en las que el argumento no es original de él, sino de un escritor venido a menos cuyo nombre literario fue André Laurie. Pese a desconocer la trama original, sí que se sabe gracias a la correspondencia disponible que Verne la modificó ampliamente, por lo que en general se considera que el argumento le pertenece.
Partimos de una herencia de quinientos millones de francos que es, en principio, para el doctor Sarrasin que se supone es el último descendiente vivo. No obstante, pronto se perfila un nuevo contendiente, Herr Schulze, con lo que al final el dinero queda dividido a partes iguales entre ambos.
De momento asistimos a las ansias de dinero de los abogados, que intentan construir un caso como el de Casa desolada de Dickens (que Verne nombra) pero que al final, dado que ambos contendientes se conforman, no se lleva a cabo. Esta es una faceta de la novela que no he visto comentada nunca: la malicia de los abogados para alargar y consumir todo el dinero disponible mediante el pleito.
Pero ese no es el objetivo de Verne, que tiene en su cabeza fines más altos. Por un lado, Sarrasin monta una ciudad utópica en una de las costas de Estados Unidos, y Shulze, en la otra, una fábrica de armamento que pronto se convierte en el primer suministrador bélico internacional.
Ya tenemos montada la antítesis y el choque de voluntades. El alemán, que cree pertenecer a una raza superior, se empeña hasta lo indecible en destruir la utopía porque ha sido creada por una raza inferior.
Todo esto suena, y no poco, a lo que posteriormente sabemos que ocurrió con Alemania en las Primera y Segunda Guerras Mundiales. Y es por ello por lo que durante un tiempo la obra estuvo prohibida tanto en Alemana como en España y quiero creer que en más países.
Finalmente gana el doctor Sarrasin no por su mejor hacer, sino porque Schulze comete un imperdonable error, potenciado por su propia soberbia.
Tenemos pues un enfrentamiento entre el bien y el mal en primera instancia. Una segunda lectura nos dirige hacia el tema de la preponderancia de las razas y, finalmente, una tercera (que no he visto comentada en ningún lado) nos indica que la ciencia puede estar tanto al apoyo del bien como del mal.
También se considera a esta novela como la obra bisagra entre su primera etapa sansimoniana y optimista sobre el poder de la ciencia para hacer el bien, y la segunda en la que predomina el apoyo de la misma para mantener y potenciar al dinero y a los que gobiernan.
No obstante es un libro muy instructivo y entretenido de leer pues no predominan esas densas y pesadas descripciones típicas del autor. Además, asistimos, como en casi la mayoría de las novelas de Verne, al rito iniciático masón por parte del hijo del doctor Sarrasin.

miércoles, 19 de octubre de 2011

¡Indignaos!, Stépane Hessel

Mucho ruido y pocas nueces. Eso es este libro. Pese a todo el revuelo que ha ocasionado no es más que una excusa para hacer proselitismo de la represión israelí sobre los musulmanes de ese área.
Con esto no quiero que se me malinterprete: no estoy defendiendo la política israelí, ni acusando a la otra parte. Lo que estoy diciendo es que el autor comienza con unas palabras muy coherentes sobre el estado actual de la sociedad y termina en lo que le interesa: política barata.
Está muy bien eso de intentar movilizar a la juventud, pero hay que movilizarla para todo, no solo para el tema palestino.
Sin embargo, el panfleto tiende hacia lo político en lugar de hacia lo social, y le sobra la última parte, que es completamente parcial, no respecto a lo que pasa allí, sino respecto a lo que pasa en muchos otros lugares, con problemas enormemente más graves que mantener a unos musulmanes recluidos en una ciudad.
Por lo tanto, pese a no estar mal, pienso que al autor se le ve claramente el plumero a mucha distancia.

lunes, 17 de octubre de 2011

La caza del meteoro, Jules Verne

La caza del meteorio es una de las obras póstumas de Verne (escrita alrededor de 1898) que modificó su hijo antes de la publicación y la única que, a decir de los expertos, continua manteniendo el espíritu original. Ignoro si es una de las obras de las que se posee el manuscrito original, y por lo tanto se conoce todo lo añadido, pero hay una cosa clara: Zépiryn Xirdal es añadido de Michel Verne.

Queda por tanto bastante claro el argumento original respecto al final. Ignorando al citado personaje, y quizás a Seth Stanford y a Arcadia Walker, el argumento original podría no estar muy lejano de lo siguiente.

El profesor Forsyth y el doctor Hudelson, ambos de forma simultánea, localizan el meteoro en el cielo de Whaston, lo que les lleva a pedir la prioridad en el descubrimiento y la consiguiente pelea local entre ambos, con la separación del noviazgo del sobrino e hija.

Al cabo de unos días nublados, el meteorito reaparece y ambos son capaces de calcular de forma erronea la trayectoria. Finalmente, los observatorios profesionales toman el control y determinan que el bólido caerá en el lugar descrito de Groenlandia.

Tras la pelea de ambos y todos los sucesos que se narran en la historia, quizás por un rayo, o una tormenta, o por cualquier otro evento, el meteorito cae al mar y desaparece.

Al argumento original podríamos añadirle la pareja que se casa en el primer capítulo, se divorcia a la mitad y se vuelve a casar al final, como complemento picante al ya de por sí insulso noviazgo de los los protegidos de los dos astrónomos.

Añadamos también a Zéphiryn Xirdal como mano negra que modifica la trayectoria del meteorito y su actuación al final y obtendremos el argumento definitivo con el que se ha presentado la obra, enriqueciendo lo que de seguro era un desarrollo originalmente bastante pobre.

Siendo una novela del tercer ciclo de Verne, ni es pésima ni contiene los típicos temas catastróficos, sino que se trata más bien de la enésima revuelta al mito espacial y telúrico al que ya hemos asistido en obras de mayor enjundia como son De la Tierra a la Luna, Alrededor de la Luna, El secreto de Maston y Héctor Servadac. Más bien asistimos a la creación de una novela del Verne más bajo y quizás más derrotado literariamente.

Virginia Edition, o cómo leer las obras completas de un autor (VIII): Expanded Universe (31)

Este es el libro más infumable de los publicados por el autor en vida. Incluso podríamos decir que lo es de toda la producción literaria de ...